Se está haciendo tristemente famosa la microcervecería islandesa Steðji por el uso continuado y gratuito de partes de ballena para la elaboración de cerveza. Empezaron con huesos y ahora lanzan la cerveza con testículos de ballena y rizando el rizo, ahumada con excrementos de conejo.
la justificación se fundamenta en la simple posibilidad de hacerlo, ya que pueden cazar ballenas por motivos culturales.
Sobre el tema de la caza, y mas allá de que estemos o no de acuerdo, resultaría justificable sobre su acerbo cultural, que permite a pueblos indígenas continuar sin perjuicio de la especie con cazas selectivas de animales que sirven de alimento.
Ahora bien, justificar bajo esta posibilidad el empleo arbitrario de dicho material para elaborar cerveza es un absurdo argumental. La propia web del productor es un cúmulo de justificaciones y comparaciones con lo que comen otros pueblos, alusiones vikingas, runas……falsa mitología para forzar una relación inexistente.
Aún cabría una minúscula justificación si nos encontráramos ante genios cerveceros que habiendo explorado todas las posibilidades y rebasando el conocimiento cervecero ancestral vikingo, el cervecero belga o alemán decidieran abrirnos la mente a lo inclasificable, a lo máximo en cerveza, pero he aquí que una pequeña consulta a las clasificaciones de cualquiera de sus cervezas (no solo las de ballena) en Ratebeer, Beeradvocate o Untappd nos muestran la baja calidad de las mismas.
Nos encontramos con una cervecera que parece le importa poco la cerveza, las ballenas o la cultura….y ese creo que no es el camino.
Y estoy seguro de que si Thor levantara la cabeza les iba a dar fuerte con Mjolnir.